28 ago 2013

Llegué con un día de retraso

Llegué con un día de retraso a la universidad, y llego con un día de retraso para felicitarle en este blog. Cuando entras recién a la universidad, perderte el primer día es como perderte un año, cuando llegas... la gente ya se ha conocido. Y lo nuestro fue aún más difícil porque el grupo al que pertenecíamos, muchos de ellos ya habían estado juntos en un curso 0 de estadística. Penetrar en esa masa ya compacta fue difícil, pero  yo pude entrar gracias a un agujerito que fueron abriendo M, F, V y J.  

En todos mis recuerdos de primer año aparecen ellos. Eramos muy distintos y a simple vista podría parecer increíble que encajásemos, pero yo sabía que con J lo haría. Siempre lo digo, y siempre lo diré (y él lo dice de mí) pero sabía que era de los míos. Un chico muy serio aparentemente, con el que yo cogí confianza enseguida y al que me tomé la libertad de pegar muy a menudo. No sé cómo me aguantabas.